Las cejas protegen a nuestros ojos del exceso de luz, además de ser el marco de tus ojos. Para que cumplan bien su función deben permanecer en buen estado, entonces, ten cuidado cuando las vas a arreglar dado que la forma y el tamaño influyen mucho en la expresión de la cara.
Con el paso de los años los nutrientes y las propiedades del cuerpo se van perdiendo, lo cual va debilitando las cejas y produciendo caída de las mismas; sin embargo hay otras causas de caída, entre las que están la herencia, cambios hormonales, enfermedades, pigmentación y exceso de maquillaje.
En el caso de perder tus cejas, existen las cejas tatuadas; no obstante los especialistas no recomiendan este procedimiento, ya que causa daños permanentes por la punción de la aguja, y a largo plazo la piel de la cara cambia por estar expuesta al sol, lo cual decolora la tinta, y así es como terminas con cejas verdes o azules. Adicionalmente, recuerda que al ser un tatuaje podría llegar a crear queloides en la piel lo cual se convierte también en un problema médico.
Sin embargo, existen los trasplantes de cejas, que se realizan con anestesia local y utiliza injertos de cabello propio, por lo que no existe rechazo del injerto y el crecimiento es asegurado.
Si decides realizarte un procedimiento de trasplante de cejas, asegurate de que se haga en un sitio reconocido y en manos de buenos especialistas, porque aunque sea un procedimiento ambulatorio, debe realizarse de la mejor manera.