En el antiguo Egipto, el cabello era símbolo de bienestar y salud, es por ello que no sorprende que fueran la primera civilización en darle cuidados especiales, sobra decir que la calvicie no era una buena experiencia e incluso se llegaron a inventar algunos remedios caseros para contrarrestar sus efectos: algunos de ellos son totalmente descabellados y otros, siguen estando vigentes.
El pelo era un motivo de orgullo en cualquier clase social para esta civilización, de allí que se especializaran en la elaboración de pelucas muy trabajadas e incluso inventaran peinados tan avanzados que siguen sorprendiendo al día de hoy e incluso entrando en tendencias actuales de vez en vez.
¿Qué tratamientos se usaban para la calvicie?
Lociones a base de grasa animal
Una de las formas en que los hombres del antiguo Egipto intentaban combatir la calvicie era preparando una loción con grasa de animales peludos como leones o cabras, pues se creía que, al aplicar este tónico sobre la cabeza, se trasmitirían los pelos del animal del cual se extrajo el aceite. Claramente, esta técnica no tiene ningún fundamento y no funciona.
Mezcla de aceites
A pesar de herrar con la alternativa anterior, los antiguos egipcios también desarrollaron técnicas que son usadas hasta la época actual, esta en específico, consistía en usar el aceite de almendras dulces y el aceite de ricino para estimular el crecimiento del cabello. Estos aceites, en efecto, producen un efecto positivo en el pelo debido a las proteínas que contienen y el aumento de circulación sanguínea que permite a los folículos pilosos la recepción de nutrientes.
A pesar de que esta segunda opción no es para nada desatinada, los resultados pueden tardar muchísimo tiempo y no ayudan con folículos muertos u obstruidos, en cuyo caso, la única solución a la calvicie son los trasplantes capilares.
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Luces igual por los siglos de los siglos y, aunque no queremos que te veas viejo, tampoco queda bien que a los 30 sigas teniendo un corte de quinceañero. Es decir, si todavia parece que te peinara tu mamá, necesitas un cambio.
