La gran mayoría de personas aman su pelo y perderlo no está dentro de sus planes. Hasta pensarlo da miedo y es una de esas catástrofes que no le deseamos a nadie. La buena noticia es, que lo puedes evitar. Cuidar tu pelo es importante.
Tu cabello hace parte de tu cuerpo y necesita de cuidado. Sabemos que no querrás pararte frente al espejo y que veas parte de tu piel, en una zona que debería estar cubierta de pelo… eso es algo que no queremos que pase y que desmotiva.
Lo ideal para este tipo de rostro es correr el pelo de la frente para crear un poco de volumen y ángulos en la parte superior. El estilo adecuado sería un corte más “clásico”. Es decir, más corto en los laterales y ligeramente más largo en la parte superior, con una separación más natural hacia el costado. Debes evitar el exceso de pelo en la frente, ya que suaviza las características y aumenta la redondez de la cara. Es un rostro que tiene versatilidad para llevar distintos cortes. Un buen dato es no llevar las patillas demasiado largas, éstas hacen que el rostro se vea más largo y estrecho. Con un rostro ovalado no es necesario el vello facial para llenar cualquier vacío desproporcionado, así que van a poder sacarse la barba o llevarla muy corta.
Considerado como el ideal masculino, la cara cuadrada se caracteriza por su fuerte línea de la mandíbula. Al igual que el óvalo, es una gran base para la mayoría de los estilos y es lo suficiente versátil como para trabajar cortes de pelo tanto cortos como largos. Para hacer que el óvalo se vea más alargado y a su vez suavizar las facciones tan marcadas de este tipo de rostro, los cortes de pelo que son más largos en la parte superior y con laterales cortos serán los más idóneos. Las medias melenas que tengan mayor concentración de volumen de cabello en la parte superior de la cabeza. Los laterales a una medida intermedio, son otra buena opción para los que quieren llevar el pelo más largo. Unas patillas largas y finas pueden unirse con una barba completa, muy corta en los laterales del rostro y más notable en la zona del mentón.
En este rostro se mezclan dos rostros básicos que son el cuadrado y el alargado. En este caso, el objetivo es restar longitud al óvalo y suavizar la angulosidad de sus facciones principalmente en la zona maxilar. Los cortes de pelo más apropiados son aquellos que dejan caer el volumen del cabello hacia la frente. Esto ayudará a restar longitud al óvalo. Otra opción que puede proporcionar equilibrio son los cortes de cabello más largos en los laterales y cortito en la parte superior de la cabeza, siempre y cuando en la parte superior supere un poco más al largo de los laterales.
El objetivo para el rostro redondo es afinar la zona de las mejillas y alargar el óvalo para que éste adquiera una forma más próxima al rostro ovalado. Los cortes de cabello más largos en la parte superior de la cabeza con los laterales cortitos ayudarán a que el rostro se vea más alargado. También las medias melenas cortas, con los laterales escalonados ayudarán a que el rostro se vea menos redondeado. El uso de una barba completa mediana, que se haga más notable en la zona del mentón y se una con las patillas deben ser finas para encuadrar el perfil del óvalo y un bigote de forma recta contribuirán a conseguir el objetivo para este rostro.
Este aceite que tanto utilizas para cocinar platos sabrosos y saludables es uno de los mejores aceites naturales para reparar el cabello seco y con falta de hidratación. Esto es a gracias a la composición que ofrece, y es que posee ácidos grasos esenciales, minerales y vitaminas excelentes para nutrir y regenerar las fibras capilares. Así da como resultado un pelo hidratado, fuerte y brillante. Además, ayuda a combatir el frizz, mejorar el aspecto de las puntas abiertas o quebradizas y, al ser antioxidante, favorece el crecimiento del cabello. Su aplicación es sencilla, debes calentarlo y aplicarlo de medios a puntas. Envuelve tu pelo con una toalla y deja que las propiedades del aceite de oliva penetren en él durante 30 minutos. Pasado este tiempo, ya podrá enjuagar y realizar un lavado normal.
Los tratamientos capilares con aceite de almendras están especialmente indicados si tienes problemas de sequedad en su cabello, encrespamiento, descamaciones y puntas que se parten con facilidad. Es un producto muy rico en nutrientes como vitaminas A, B y E, los cuales permiten crear una barrera de protección sobre la hebra del pelo y prevenir el daño que pueden provocar agentes externos. Además, si se utiliza directamente sobre el cuero cabelludo es un buen remedio para reducir la comezón, descamación y mejorar la irrigación sanguínea. Vierte unas gotas de aceite de almendras en la palma de tu mano, caliéntalo ligeramente frotando con ambas manos y aplícalo sobre las partes secas de tu cabello, extendiéndolo de manera uniforme. Hazlo sobre el pelo húmedo y deja actuar unos 20 minutos. Luego, retira con abundante agua tibia.
El aceite de coco se ha convertido en una opción ideal para humectar, nutrir e hidratar los cabellos más secos y dañados. Actúa como un acondicionador natural y previene el envejecimiento de las fibras capilares. También protege el pelo del uso continuo de secadores y planchas, facilita el peinado, combate la caspa y aporta un brillo sublime. Puedes aprovechar todas sus propiedades de formas distintas. Una de ellas es aplicando unas gotas de aceite de coco sobre el cabello húmedo, dejar actuar durante 20 minutos y, pasado este tiempo, enjuagar con agua tibia.
También conocido como oro líquido, se trata de un producto que impide que el pelo se reseque demasiado, esté áspero al tacto y con una apariencia poco estética. Principalmente, sus ácidos grasos esenciales permiten hidratar las hebras en profundidad y mejorar la producción de queratina, lo cual es básico para que el cabello se mantenga sano, fuerte, abundante y suave. Puedes aplicarlo cuando el pelo está seco de medios a puntas. Distribuye bien el producto y envuelve el pelo con una toalla caliente.