Pogonofobia: la fobia a la barba y el vello facial
La barba ha sido una tendencia marcada en los últimos años y aunque parezca increíble hay personas que le tienen fobia. Los motivos de la pogonofobia van desde recuerdos traumáticos en el pasado relacionados con hombres barbados a razones culturales y estereotipos negativos. Esta fobia puede producir en quienes la padecen episodios de ansiedad acompañados de sudor, náuseas, latidos cardíacos irregulares, hiperventilación y temblores.
A pesar de ser un fenómeno real, se estima que la pogonofobia es una de las fobias menos frecuentes: menos del 7% de la población mundial la padece en mayor o menor grado.
Los extremos sobre la barba
Si bien un pequeño porcentaje de la población se ve afectado por la fobia al vello facial, la mayoría de esta busca, en el caso de los hombres: tener una barba tupida y abundante y, en el caso de las mujeres: los hombres con barba. Esto quedó demostrado en un experimento publicado en la revista Evolution & Human Behavior hecho por la Universidad del Sur de Gales, los científicos Barnaby Dixon y Robert Brooks, estimaron que las barbas hacen que los hombres resulten mucho más atractivos para las mujeres.
Los científicos experimentaron con 351 mujeres, a las cuales se les mostró diez fotos de hombres entre los que se encontraban cuatro estilos diferentes, desde hombres totalmente afeitados a hombres muy barbudos. Los resultados arrojaron que la mayoría eligió a las fotografías de los que tenían más barba. Después a las participantes se les solicitó que calificaran el atractivo, la salubridad, la masculinidad y las habilidades de crianza, ejercicio en el cual, los hombres con barba también salieron victoriosos.
Pasando a un escenario más local, el periódico colombiano El Tiempo, realizó un sondeo de opinión sobre el tema y estos fueron los resultados:
En definitiva, la barba es una tendencia que tiene más seguidores que detractores y es por ello que, como mencionamos antes, los hombres siguen buscando la forma de tener un bello facial digno de representar su propia masculinidad. Si no logras conseguir el efecto de leñador de la montaña, acércate a nosotros pues tenemos alternativas para ti.