En un procedimiento simple como lo es un trasplante de pelo siempre cabe la oportunidad de realizar pequeñas cosas que ayudan a que tengamos unos mejores resultados.
Es por eso que, aunque puedan parecer simples, algunas acciones que podemos llevar a cabo tienen un impacto sensible en el aspecto y el proceso de recuperación.
Es por ello que traemos un listado de las 10 cosas que podemos hacer por nosotros mismos previamente a nuestro trasplante, para asegurar que sea un completo éxito:

10. Lava tu cabello: tanto en la noche anterior como en la mañana del procedimiento, pues un cabello grasoso o impurezas en el cuero cabelludo pueden crear molestias.

9. Lleva ropa cómoda: La comodidad es lo principal, pero si puedes no uses nada que tengas que quitártelo halando u oprimiendo tu cabeza (busos, camisetas, sacos).

8. Consigue quien te lleve: Puede que después del procedimiento no te encuentres en condiciones de conducir, ni tampoco de viajar en transporte público. Razón por la cual necesitas de un amigo, familiar o un servicio especializado para devolverte tras la intervención.

7. Evita fumar: En los tres días anteriores a la intervención evita fumar, ya que esto disminuye notablemente el flujo sanguíneo, sobretodo al área del cuero cabelludo.

6. Evita los medicamentos: sobretodo aquellos anti inflamatorios, pues su efecto persiste durante días y genera complicaciones.

5. Olvídate de la vitaminas: vitaminas y cualquier suplemento multivitamínico debe ser suspendido, pues al quirófano debes llegar en estado natural para que se asimilen mejor los injertos.

4. Adiós a los tinturas: tu cabello debe llegar en su forma natural, pues así elimina las posibilidades de que sea rechazado.

3. Evita el esfuerzo físico: Una vez afuera del quirófano debemos evitar esforzarnos lo menos posible, para no presentar exceso de flujo sanguíneo.

2. El alcohol y la comida picante quedan prohibidos: Debemos enfocar los esfuerzos de nuestro cuerpo en sanar nuestro cuero cabelludo.

1. Duerme con la cabeza elevada: Acuéstate usando 2 almohadas o más. Así evitarás mayor cicatrización y heridas en la zona tratada en el postoperatorio.